El consejero de Administración Pública y Hacienda, Ángel Franco, ha comparecido ante la Comisión de Administración Pública de la Asamblea de Extremadura para describir las líneas generales que perfilarán el funcionamiento de su cartera a lo largo de esta legislatura.Durante su intervención, Franco anunció la elaboración de un nuevo Proyecto de Ley de Función Pública, con vistas a conseguir una Administración "abierta al ciudadano" y "adaptada a la nueva realidad" de la región, en cuya constitución los empleados públicos son "elementos fundamentales".
A juicio del consejero, la "necesidad" de esta iniciativa responde al objetivo de crear un marco legal que brinde a los empleados públicos "oportunidades suficientes" de promoción profesional y de formación adecuada y continua.
Franco explicó que este Proyecto de Ley contemplará la evaluación del desempeño de los trabajadores funcionariales, estableciendo criterios de "productividad y rendimiento", que se traducirán, además, en "compensaciones" a la mayor dedicación del funcionario con avances en su carrera profesional.
En lo referente al acceso al empleo público, el consejero de Economía y Hacienda anunció que los procesos de selección se "agilizarán", a través de convocatorias "más frecuentes", que respondan a la demanda ciudadana y a las propias necesidades de la Administración.
El consejero comenzó su discurso recalcando su apuesta por la "eficacia, transparencia y consenso" como principios fundamentales para conseguir su meta de una Administración "más moderna y de calidad".
La misión básica de la Consejería, según explicó Franco, es la de "reunir los recursos financieros" que Extremadura necesita para alcanzar los objetivos que figuran en el programa del Gobierno Regional, desgranado en su día por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, en su discurso de investidura; y procurar que los bienes de la Administración Autonómica y las personas que trabajan a su servicio "cumplan con su papel".
Dentro del listado de preocupaciones prioritarias de la Consejería de Economía y Hacienda, Franco se refirió al Proyecto de la e-Administración, como vía para "agilizar y acercar" la Administración al conjunto de los ciudadanos.
En este sentido, el consejero puso el acento en el papel "indispensable" que adquieren las Nuevas Tecnologías permitiendo que los usuarios realicen todo tipo de trámites, certificados, licencias, pago de impuestos o solicitud de becas, por ejemplo; de forma "rápida y eficaz", y sin necesidad de acudir presencialmente a las dependencias de la Junta.
Paralelo a este proyecto, Ángel Franco habló, además, de otras actuaciones que implican a las Nuevas Tecnologías. Concretamente, el consejero anunció la creación del sistema de Pago Telemático, la extensión del uso de la firma electrónica, la disminución del uso del papel como medio de obtener información, entre otras cuestiones; como forma de garantizar y reforzar el papel de las Nuevas Tecnologías en la Administración.
En cuanto al control interno de la Administración Pública, el consejero destacó que los conceptos de "inspección y calidad" han de ser "complementarios; para lo que propone actualizar el marco vigente de modo que refleje los nuevos métodos de gestión de los servicios, así como el seguimiento y diagnóstico de su calidad; y la creciente participación del ciudadano.
Tiene la palabra, por el Grupo Parlamentario Popular-Extremadura Unida, don Antonio Quintana, por un tiempo de diez minutos. SR. QUINTANA GUERRERO: ... a esta Comisión a la que usted comparece a petición propia. Felicitarle por su nombramiento al frente de la Consejería de Administraciones Públicas y Hacienda, hacer extensiva ésta a quienes hoy le acompañan y asesoran, y agradecer la presencia de los medios de comunicación durante esta jornada. Espero y esperemos, señor Consejero, que también comparezca en esta Comisión cuando así sea solicitado por el Grupo Parlamentario Popular. Por otro lado, como partido en la oposición, reiterar, una vez más, nuestro firme compromiso con el pueblo extremeño en nuestra acción política a lo largo de la séptima legislatura. Dicho ello, y centrándonos en la cuestión que nos ocupa en esta jornada, usted, señor Consejero, como responsable de su departamento, tiene –y tenemos– por delante bastante trabajo. No dude en encontrar al Grupo Parlamentario Popular en todo aquello que suponga mejorar lo que se está haciendo bien, cambiar lo que se esté haciendo mal y avanzar hacia una Administración más eficaz y más sensible no sólo a las demandas sociales, también a las de nuestros empleados públicos y sindicatos. Por ello, es del todo necesario un nuevo enfoque de los recursos humanos, una nueva forma de gestionar la organización, posibilitando y contribuyendo a un mejor alcance de los objetivos. Usted, señor Consejero, y los asesores que le acompañan y nos acompañan, saben y sabrán que la parte más sensible de la Administración no es otra que la gestión de personal, en un entorno eminentemente burocratizado y donde las claves del éxito de la organización son la satisfacción, la motivación, las expectativas, la formación y la innovación, como respuestas que neutralicen el lastre que produce la descoordinación de funciones, la imprecisión, la falta de conocimientos, la lentitud, la falta de comunicación y, por supuesto, la desconfianza hacia la introducción de nuevos sistemas de gestión de trabajo. En conclusión, hay que apostar por una organización de calidad, ágil en la tramitación de los proceso diarios, que optimice recursos, que reduzca costos internos, y mejorando, en todo caso, las interrelaciones de la Administración prestadora del servicio con el ciudadano, como usuario del mismo. Pero, como le decía al principio de mi intervención, tenemos mucha tarea por delante. La entrada en vigor de la Ley 7/2007, de 12 de abril, Estatuto Básico del Empleado Público, implica que la comunidad autónoma –incluida Extremadura–, en el ámbito de sus respectivas competencias, habrá de aprobar o modificar las leyes de la Función Pública de su Administración, así como la norma aplicable a la Administración local, respetando, en este último caso, la autonomía organizativa de las entidades locales, por
ResponderEliminarlo cual, se habrá de afrontar, de forma activa y decidida, la reforma legislativa por la cual dotemos a Extremadura de una nueva Ley de Función Pública, o bien adaptar la que tenemos vigente, tal y como preceptúa el Estatuto Básico del Empleado Público. En este sentido, desde nuestro punto de vista, optamos por lo primero, es decir, la elaboración de una nueva Ley de la Función Pública para Extremadura, que deje a extramuros la dispersión legislativa en materia de Función Pública y que nos permita afrontar los retos que la Administración autonómica necesita. Habrá, pues, que orientarse hacia la formación, la oportunidad para la promoción profesional, una gestión ágil, donde habrán de tenerse en cuenta, muy en cuenta, para nuestros empleados públicos ese catálogo de derechos, que distingue entre los de carácter individual, los colectivos..., donde habrá que incorporar a los más tradicionales otros de reciente reconocimiento, como los relativos a la objetividad, la transparencia, los sistemas de evaluación, el respeto a la intimidad personal, especialmente frente al acoso sexual o moral, la conciliación de la vida personal, familiar, laboral, la negociación colectiva, tal y como quiere el legislador, y así lo epigrafía en le Exposición de Motivos del precitado Estatuto Básico del Empleado Público, cuestión esta, entre otras, que habrá de tener su asiento y acomodo en el futuro texto de la Función Pública, del que habrá de dotarse nuestra comunidad autónoma. Una ley que deberá nacer, gestarse desde el diálogo, el consenso y la participación de los interlocutores sociales. En segundo lugar, conviene recordar que el ciudadano ya no es el simple pagador de impuestos, sino que pide cuenta de cómo se ha gestionado su dinero. Ya no es el consumidor resignado y pasivo, sino que se sabe ciudadano de derecho, dispuesto a exigir unos servicios de calidad. Evidentemente, el servicio al ciudadano exige consagrar ese derecho a comunicarse con la Administración por medios electrónicos, como usted ha expuesto a lo largo de la jornada. La contrapartida a ese derecho es la obligación, es decir, de la Administración, de nuestra Administración, de dotarse de los medios y sistemas para que ese derecho pueda ejercerse con plenitud del mismo. Ésa, y no otra, es una de las grandes novedades de la Ley 11/2007, de 22 de junio, de acceso electrónico de los ciudadanos a los servicios públicos, como usted sabe, sin más límite que las actividades que desarrollen los ciudadanos en régimen de derecho privado, y que –en los términos expresados en su Disposición Final Primera– establece que la misma será de aplicación a las administraciones públicas, entendiendo por tales la General del Estado y la de nuestra comunidad autónoma. Señorías, señoras y señores diputados, señor Consejero, cierto es que en Extremadura contamos con la Ley de Política de Modernización, del año 96, pasando por la que regula la información administrativa y atención al ciudadano, culminando en la política de modernización, la Ley 1/2002. Cierto que en Extremadura contamos con el portal junta.es, un portal electrónico, es lo que tenemos, pero decirle que, con independencia de que partimos de los soportes electrónicos por toda Extremadura y del cuerpo legal, desde el Grupo Parlamentario Popular creemos que lo adecuado es ofrecer al ciudadano una Administración a su servicio. O lo que es lo mismo: impulsar la Administración electrónica y convertir definitivamente a Extremadura en una verdadera Sociedad de la Información. Ahí estaremos, y ustedes, a través del Proyecto Indra, pues creemos que culminará este resultado. Aunque, desde luego, largo y lento nos los fiáis. Largo son 34 meses, y en esos 34 meses entendemos que los sistemas electrónico han avanzado bastante, ¿no? En tercer lugar, me referiré a diversas cuestiones de interés general donde queremos poner el acento, con la finalidad de ejercer una oposición crítica, constructiva y eficaz.
Desde el Partido Popular estaremos en permanente vigilia con la finalidad de que la Administración de nuestra comunidad funcione y funcione bien. Precisamente por eso, nosotros le preguntamos: ¿cree, señor Consejero, que en Extremadura se están dando las condiciones de infraestructuras para que el DOE aparezca ya en Internet? Es decir, ¿todos los hogares de Extremadura están en esas condiciones de acceder a Internet? También quiero adelantarle que nosotros seremos receptivos a los problemas, que asumiremos las demandas sociales y los planteamientos de los sindicatos, pero no le quepa la menor duda de que siempre pondremos encima de la mesa la solución o las soluciones a los problemas. Otra cosa bien distinta será la actitud del Grupo Socialista con respecto a las propuestas, iniciativas, cuestiones de diversa índole, que desde el Grupo Parlamentario Popular presentemos a lo largo de esta legislatura, en aras siempre de mejorar nuestra Administración. A mí me gustaría dejarle encima de la mesa, señor Consejero, una serie de reflexiones en voz alta. En primer lugar, consideramos que es un acierto la creación de la Consejería de Administración Pública y Hacienda: está bien poner en la misma persona en la mano derecha a los empleados públicos y en la mano izquierda el dinero, o viceversa. Pero, por ello, también esperamos de usted que dé el impulso que la Administración Pública viene demandando y que se pueda hacer realidad. Una observación: Dirección General de Administración Pública. Tenemos la impresión –por decirlo en tono muy cordial– de que no funciona de la forma adecuada. Tomemos como referencia el artículo 15 del V Convenio Colectivo del Personal Laboral. En ese apartado se habla de las características de los concursos de traslado. ¿Cuántas veces se han reunido en esas comisiones de valoración para resolver esos concursos de carácter abierto y permanente? ¿Cuántos se han resuelto con periodicidad cuatrimestral? En definitiva, señor Consejero, de lo que le estoy hablando es de la identificación de los puntos débiles de su organización, que permitan intervenciones de mejora y que garanticen los resultados. Una pregunta más: ¿cuándo cree usted que la Escuela de Administración Pública de Extremadura deberá elaborar un temario para los opositores? ¿Cuándo, señor Consejero, habrá una segunda actividad para los empleados públicos? ¿Cuándo la homologación salarial? ¿En cuánto valora el señor Consejero el poder adquisitivo perdido por los funcionarios, si es que considera que ha existido esa pérdida de poder adquisitivo, o, simplemente, en qué plazo se compromete a recuperarlo? Por último, me permito dejarle encima de la mesa la siguiente cuestión: esperemos que en esta legislatura se alejen, de una vez por todas, esa serie de escándalos relativos a las oposiciones a la Junta de Extremadura, que han ensombrecido la transparencia y la igualdad de oportunidades en la legislatura anterior. Por último, una obviedad: la ley está para cumplirla; no hay obviedad mayor. Se lo recuerdo porque el Decreto Legislativo de la Función Pública Extremeña establece que corresponde al Consejo de Gobierno –del que usted forma parte– aprobar la oferta anual de empleo público de la Junta de Extremadura. ¿Cumplirán la ley? Por último, en algún momento tendremos que abordar la política de reinserción social, según la Disposición Adicional Décima del Decreto Legislativo de la Función Pública. Asimismo, indicarle que nos parece oportuno –con respecto al 112– incrementar los efectivos y medios, con la finalidad de que disminuyan los tiempos de respuesta. Señorías, señora Presidenta, –acabo–, sólo me queda agradecerles la atención prestada, reiterar nuestro ofrecimiento de colaboración y diálogo a lo largo de este periodo, el de las grandes reformas legislativas, donde usted tiene mucho que ver y nosotros también. Sólo me queda hacer un llamamiento al consenso y al diálogo en todas aquellas cuestiones de interés general para Extremadura y los extremeños, dejando constancia
del compromiso político del Partido Popular con el pueblo extremeño, teniendo siempre en cuenta que, llegado el momento de las disensiones que las mismas supongan para ambos grupos, un paréntesis para la reflexión. Extremadura así nos lo demanda. Muchas gracias por su atención.